Posteriormente ya me disponía a sacar la lectura nº6 con el fin de comentarla, pero no fue así. En lugar de eso nos reunimos en grupos como en el primer día de clase; esta vez con el fin de hacer un balance del aprendizaje durante el trayecto realizado. Fue interesante por el hecho de observar como había compañeros que pensaban cosas parecidas o hasta iguales a las tuyas, pero también como algunos sacaban aprendizajes que a mi ni se me habían pasado por la cabeza. También como con algunas ideas expuestas estaba de acuerdo, otras las matizaba desde mi punto de vista y otras en las que no podía estar de acuerdo; pero ahí está la riqueza de interactuar con más gente. Así que, desde esta visión, también sirvió de nuevo para conocer más a otros compañeros que, al no ser del grupo, tienes menos trato con ellos, o incluso un trato nulo. Aunque me di cuenta de que no era sólo cosa mía, sino que todos los allí presentes, a pesar de no ser una clase de un elevado número de alumnos, estábamos más "apiñados" con las personas de nuestro grupo de trabajo, conociendo sólo de vista a los otros compañeros a los que en algunos casos ni nos habíamos cruzado antes unas palabras.
miércoles, 25 de noviembre de 2009
Liberalismo y Síntesis de Aprendizaje
Posteriormente ya me disponía a sacar la lectura nº6 con el fin de comentarla, pero no fue así. En lugar de eso nos reunimos en grupos como en el primer día de clase; esta vez con el fin de hacer un balance del aprendizaje durante el trayecto realizado. Fue interesante por el hecho de observar como había compañeros que pensaban cosas parecidas o hasta iguales a las tuyas, pero también como algunos sacaban aprendizajes que a mi ni se me habían pasado por la cabeza. También como con algunas ideas expuestas estaba de acuerdo, otras las matizaba desde mi punto de vista y otras en las que no podía estar de acuerdo; pero ahí está la riqueza de interactuar con más gente. Así que, desde esta visión, también sirvió de nuevo para conocer más a otros compañeros que, al no ser del grupo, tienes menos trato con ellos, o incluso un trato nulo. Aunque me di cuenta de que no era sólo cosa mía, sino que todos los allí presentes, a pesar de no ser una clase de un elevado número de alumnos, estábamos más "apiñados" con las personas de nuestro grupo de trabajo, conociendo sólo de vista a los otros compañeros a los que en algunos casos ni nos habíamos cruzado antes unas palabras.
martes, 24 de noviembre de 2009
Ciencia y Método
1. Significado de la Ciencia
Sobre ciencia, Carballo prefiere dar una construcción personal que intenta explicitar su experiencia e investigaciones. Así pues, la ciencia es una actividad humana y social, cuyos éxitos han permitido por un lado acercarse al conocimiento de los límites del hombre, de su humanidad, y por otro, han coadyuvado igualmente a desarrollar en él un sentimiento de prepotencia y de fe en las realizaciones humanas en forma de culto cuasi-religioso.
La ciencia es cada vez más consciente de su humanidad, de sus límites. Su objeto y métodos están basados en los relativismos: las leyes y teorías científicas son siempre provisionales y limitadas en el tiempo y en el espacio.
2. Ciencia y Progreso
La ciencia pretende describir y/o explicar la Naturaleza, con el objetivo último de servir de base para la acción progresiva que conduzca al hombre al ideal de libertad. Uno de los grandes problemas ha sido y es el establecimiento de criterios de demarcación de lo científico. Este supuesto problema tiene una raíz psicológica (la búsqueda de seguridad) y unas consecuencias sociales regresivas (dogmatismo). Por ahí no va el progreso ni la libertad.
3. Ciencia y Concepción del mundo
Una concepción del mundo no es un saber en el sentido en que lo es la ciencia positiva. El objetivo final de la ciencia, sus resultados provisionales, también constituyen una concepción del mundo, ya que se nutre de los sistemas de ideas vigentes para construirse.
4. Método e Ideología
El método tampoco es ajeno a la ideología, la ideología impregna todas las etapas de la investigación. Esta influencia se acentúa sin duda en las ciencias sociales y en la economía en particular.
5. Etapas del Método Científico
Existen cuatro etapas de la investigación: descripción, clasificación, explicación y verificación, utilizándose alternativamente tres modos de inferencia: deductivo, inductivo o inductivo-probabilístico y reductivo.
El investigador ha de poseer como cualidades, las de: espíritu de observación y capacidad de abstracción, fantasía creadora e intuición, habilidad formalizadora (matemática) y manual (en ciencias naturales), al tiempo que ser consciente de su propia ignorancia y ansiar la búsqueda de la verdad.
Diseccionando analíticamente las etapas del método científico encontramos:
1. La investigación de la realidad, objeto de conocimiento, no puede iniciarse sin "visión" (Schumpeter) o acto cognoscitivo pre-analítico. Acercarse a una realidad en cueros teóricos no es buena fórmula. El investigador cuenta:
a) con el marco paradigmático en que se mueve científicamente (instrumentos, hipótesis, investigaciones y antecedentes)
b) con una influencia ideológica externa
c) una circunstancia personal (psíquica) que lo motiva.
Esta visión antecede a los procesos de observación y analítica.
2. A esta visión ha de seguir una observación de los hechos, de la realidad, a la que sigue un proceso teórico de inferencia inductiva o proceso de abstracción, fase descendente en la que se tratará de describir y clasificar los elementos y relaciones de esa realidad, y cuya finalidad última es la formulación de una síntesis teórica en forma de hipótesis, modelo o teoría de carácter absolutamente provisional.
3. Esta hipótesis se desarrolla deductivamente mediante un proceso iterativo, que va de lo real a lo ideal y viceversa. Esta fase nos conduce a una nueva síntesis teórica. El resultado de la investigación es siempre provisional.
4. La última etapa es la contrastación intersubjetiva.
6. Método de Investigación y Método de Exposición
El método de investigación debe distinguirse formalmente del método de exposición.
La investigación abarca todo el proceso del conocimiento científico, la exposición sólo es posible cuando culminamos la primera etapa de la investigación. Ésta consistirá sencillamente en el proceso dialéctico que, partiendo de una formulación teórica del problema, permita la realización de un análisis empírico de la realidad objetiva que nos conduzca a la formulación de una hipótesis que explique la totalidad de los hechos de forma lógica y coherente.
domingo, 22 de noviembre de 2009
Balance
Pero además de lo que es el trabajo, este día también sirvió para tener una charla más coloquial con Roberto y los compañeros. Me enteré, por ejemplo, de sus preferencias territoriales a las que debo decir, sabiendo que leerá esto, que seguiré más enamorado de los paisajes naturales segovianos, su gastronomía y sus pequeños parajes medievales, antes que el de las rías y mariscos de su amada Galicia jejeje. Aunque debo reconocer que es un orgullo poder ver y
domingo, 15 de noviembre de 2009
¿Qué he aprendido?
A pesar de todo, me gustaría recordar una frase que expresa lo pequeño que es el saber que podemos aacumular con la cantidad de conocimiento existente ahí fuera: "Daría todo lo que sé, por la mitad de lo que ignoro," de René Descartes. Y es que no sólo la mitad, un insignificante porcentaje de 1/100000000 (y así podría poner ceros hasta ocupar prácticamente infinidad de entradas) es más de todo aquello que lamentablemente llegaremos a aprender en toda nuestra vida.
El mecanismo de la investigación científica ¿Cómo se desarrolla la investigación?
- la primera tarea de la investigación consiste en observar los hechos, en seleccionar los más significativos, en descubrir las relaciones que los unen entre sí y en evidenciar, en cada hecho concreto, los aspectos más sustanciales o significativos. Una vez hecho todo esto es necesario avanzar aún más, y encajar esos resultados en un esquema coherente con supuestos hipotéticos más o menos justificados, de forma que la totalidad de los hechos constituyan una explicación coherente.
- La segunda etapa del trabajo científico consiste en formular una hipótesis que explique el cojunto de los hechos de forma lógica y coherente. En esta etapa, la cualidad esencial consiste en posser una ardiente fantasía creadora.La fantasía, es la capacidad del pensamiento para crear mentalmente imágenes subjetivas distintas de aquellas observadas en la realidad, es decir, de aquellas que se desprenden de la percepción objetiva de la realidad a través de los sentidos, es precisamente esa propiedad característica del pensamiento humano gracias a la cual la conciencia humana, en principio simple capacidad de reflejar la realidad, adquiere esa capacidad de conocerla y modificarla. Conocerla, porque la fantasía, con toda la serie de imágenes y representaciones basadas en la observación de la realidad, pero que no vienen dadas por la realidad misma, permite formular las hipótesis que más tarde se comprobarán de acuerdo con los hechos. Modificarla, porque la fantasía permite al hombre crear mentalmente la imagen de aquello que no es, pero que él pretende alcanzar o realizar. En definitiva, la fantasía es lo que hace al hombre sujeto activo creativo. La fantasía se complementa con la intuición gracias a la cual el pensamiento sólo analiza las versiones mentales más verosímiles (conocimiento) o más racionales (creación). Sin embargo, esta fantasía creadora ha de estar controlada por una lógica férrea y rigurosa: "El genio aislado no llega muy lejos; necesariamente ha de someterse a la severa disciplina del pensamiento lógico." (Hegel)
- La tercera etapa consiste en comprobar rigurosamente que las hipótesis formuladas corresponden a la realidad de los hechos, para lo cual será preciso volverlos a observar, ampliando si es necesario el campo de observación a nuevos fenómenos, así como en profundizar el análisis de los hechos ya conocidos, controlando de todas las formas posibles el grado en que las conclusiones del investigador se ven justificadas, poque la mayor o menos correspondencia de los hechos reales con las teorías formuladas es el único criterio para comprobar la verimilitud de una determinada hipótesis. La rigurosa comprobación de las hipótesis, bien mediante observaciones posteriores, mediante todo tipo de experimentos, constituye el trabajo de esta etapa.Tanto en el proceso de observación como en el experimentación se estudian los hechos, pero en el primero los estudiamos tal y como nos lo presenta el universo empírico, limitándonos a seleccionarlos, mientras que a lo largo del proceso de experimentación sse crean nuevos hechos destinados a verificar las hipótesis. Un fuerte espíritu crítico y autocrítico es la cualidad esencial que se requiere en esta etapa al trabajo científico.
- La cuarta etapa consiste en modificar o sustituir las hipótesis anteriormente formuladas con los resultados de la comprobación realizada anteriormente.
Toda la operación puede ser esquematizada de la siguiente forma: observación de los hechos --> formulación de las hipótesis --> nueva observación de los hechos --> nueva formulación de las hipótesis...y así hasta el infinito.
Schumpeter describe este proceso de la siguiente manera: primero se deben identificar los fenómenos, que es un acto cognoscitivo, no es parte del trabajo analítico. Lo que hace es suministrar el objeto, el amterial sobre el cual trabajará el análisis. El trabajo analítico consiste en dos actividades diferentes: la primera es la conceptuación de los contenidos de la visión. La segunda consiste en buscar más datos empíricos (hechos) con los que enriquecer y contrastar los hechos inicialmente percibidos. Los intentos de conceptuación estimulan la búsqueda de más hechos, y los nuevos hechos descubiertos tienen que ordenarse y conceptuarse a su vez. No hay ni puede haber oposición fundamental entre "teoría" e "investigación factual".
La elaboración teórica (conceptualización de los fenómenos y formulación de las relaciones hipotéticas verificables) y la observación de los hechos (análisis) se complementan mutuamente, pero no coinciden. Si falta uno de estos dos aspectos del trabajo científico, deja de existir la ciencia. En definitiva, la ciencia nunca puede reducirse a la pura teoría abstracta, ni a la pura investigación empírica. Ambos aspectos, teórico y analítico, siguen siendo distintos, por lo que no pueden confundirse y han de utilizarse cada uno de ellos en el momento oportuno.
Hacer ciencia no significa descubrir reglas mediante la inducción (generalización) de los hechos observados, sino que supone crear hipótesis y someterlas a una verificación experimental, es por tanto, deductivo.
Los hechos siempre constituyen la base de una elaboración teórica, pero el hombre, en el momento de iniciar una investigación y antes de que se haya iniciado la formulación teórica, posee un bagaje de conocimientos y observaciones empíticas, constituido de forma más o menos espontánea. El hecho de dedicarse a una investigación concreta presupone ya un cierto interés teórico, el plantearse un problema constituye una suposición primaria y por tanto una primera formulación teórica que inicia la verdadera investigación, consciente y razonada. La investigación siempre se inicia formulando una pregunta, lo cual ya constituye un razonamiento, una teoría.
El trabajo de un estudioso aislado está siempre integrado en el seno de la actividad investigadora colectiva, social, humana. De hecho, el investigador individual utiliza no sólo los hechos observados, descubiertos y analizados por él mismo, sino también los hechos observados, descubiertos y analizados por otros; y lo mismo hace con las hipótesis formuladas por otros investigadores. El investigador individual utiliza las conclusiones y las elaboraciones de otros científicos como partes integrantes de su propia investigación y elaboración. A su vez, su investigación y elaboración también será utilizada por otros logrando así formar una cadena que permita cada vez más la comprensión de la realidad objetiva y, nos acerca a la verdad absoluta.
De todas las características peculiares del proceso de conocimiento se derivan dos importantes consecuencias de orden práctico:
- La condición esencial para poder utilizar los resultados de las investigaciones hechas por otros es que por nuestra parte hayamos ya iniciado una elaboración propia. Si no hemos iniciado esas ideas propias, se caerá en el eclecticismo."No debe llenarse la cabeza del joven con hechos, nombres y fórmulas. Para saber eso no necesita ir a la Universidad, ya que puede encontrarlo en los libros. Los profesores deberían dedicarse únicamente a enseñar a pensar a los jóvenes y a entrenarles en algo que ningún texto puede hacer. Es verdaderamente milagroso que la enseñanza actual no haya logrado ahogar la sagrada curiosidad del investigador" (Einstein)
- No sólo las concepciones y las ideas evolucionan históricamente, sino que también lo hacen los conceptos que las expresan, por ello todo investigador debe crear por sí mismo el aparato conceptual que necesita
De todo lo anterior podemos resaltar las siguientes conclusiones:
- Toda ciencia tiene un objeto de investigación concreto.
- Toda ciencia utiliza un determinado método de inbestigación.
- Toda ciencia, al aplicar un determinado método, da en cada etapa del proceso, una visión de conjunto del sector de la realidad que constituye su campo de investigación y,e n consecuencia, una determinada visión científica de la realidad, visión que no es más que ese eslabón intermedio entre comprensión y acción práctica.
Mediante sucesivas investigaciones la visión de la realidad que ofrece la ciencia se enriquece, se amplía, se hce más profunda, se modifica en sus particulares. Este esquema está formado por dos elementos:
- los hechos y relaciones comprobados científicamente, y
- los hechos y relaciones deducidos lógicamente, hipotéticos, temporalmente supuestos, que integran a los momentos aislados de la visión en un conjunto coherente.
A la luz de los nuevos datos, una parte de las suposiciones aceptadas anteriormente dejan de ser satisfactorias y son sustituidas por otras suposiciones que se acercan más a la realidad. Como resultado de este doble proceso, el esquema científico de la realidad adquiere un nuevo aspecto, a pesar de que todos los hechos y relaciones comprobados que formaban parte de la visión precedente también pasen a ser parte orgánica del nuevo esquema de la realidad.
De todo lo anterior se deduce una conclusión importantísima: en la ciencia lo esencial es el método, ya que la visión de la realidad que nos proporciona es una verdad relativa, nunca absoluta. El método científico nos ofrece los instrumentos para poder sustituir los esquemas de sucesivos momentos válidos. Puesto que el objeto de la ciencia es proporcionar una visión de la realidad cada vez más exacta, el aspecto esencial de toda ciencia es su método de investigación.
miércoles, 11 de noviembre de 2009
Concepción del Mundo
martes, 10 de noviembre de 2009
Segunda Lectura
Una concepción del mundo no es un saber, no es un conocimiento como lo es la ciencia positiva. Es una serie de principios que dan razón de la conducta de un sujeto. Cada individuo en sus hechos cotidianos plasma de manera inconsciente su propia concepcion del mundo.
Estos principios están explícitos en la sociedad en la que se vive. Esa cultura contiene un conjunto de afirmaciones acerca de la naturaleza del mundo fisico y de la vida. La parte teórica de la concepcion del mundo esta íntimamente ligada con la parte práctica
La existencia de una formulación explícita de la concepción del mundo en la cultura de la sociedad no permite averiguar cuál es la concepción del mundo realmente activa en esa sociedad pues el carácter de sobreestructura que tiene la concepción del mundo no consiste en ser un mecánico reflejo, ingenuo y directo, de la realidad social y natural vivida.
Las concepciones del mundo suelen presentar en las culturas de tradición grecorromana unas pautas muy concentradas y conscientes en forma de credo religioso-moral o de sistema filosófico. Esta última forma fue muy característica hasta el siglo XIX.
Pero la filosofía sistemática fue viendo como la ciencia positiva fue arrebatando cada campo que le competía y terminó por intentar salvar su sustantividad asumiendo un repertorio de supuestas verdades superiores a las de toda ciencia.
En los casos mas ambiciosos la filosofía sistemática ha pretendido dar razonamientos que abarcan contenidos de las ciencias positivas. Pero esta pretension puede considerarse fracasada a mediados del siglo XIX precisamente con la disgregación del más importante sistema filosófico de la historia, el de Hegel.
La filosofia sistemática fracasa debido a la constitución del sistema científico positivo durante la Edad Moderna. Este conocimiento se caracteriza por su intersubjetividad y por su capacidad de hacer predicciones exactas. Un concepto intersubjetivo quiere decir que puede ser entendido de igual forma por personas adecuadamente preparadas. La filosofía sistemática y los dogmas religiosos carecen de estas características que brindan seguridad y un rendimiento considerable al hombre, por ello la ciencia positiva termina ganando terreno la filosofía sistemática tradicional.
El que las concepciones del mundo carezcan de aquellas dos características del conocimiento positivo no es accidental sino necesario se debe a que la concepción del mundo contiene esencialmente afirmaciones sobre cuestiones no resolubles por los metodos decisorios del conocimiento positivo que son la verificación o falsación empíricas y la argumentación analítica. Una auténtica concepción del mundo debe contener la cuestión acerca de la existencia o la inexistencia de Dios, de la finitud o infinitud del universo, etc. y esos enunciados no pueden ser probados empíricamente. Esto no quiere decir que el conocimiento positivo no abone una determinada concepción del mundo más que otra pero abonar no es lo mismo que probar en sentido positivo.
Estos rasgos de la situación permiten plantear correctamente la cuestión de las relaciones entre concepción del mundo y conocimiento científico positivo. una concepción del mundo que tome a la ciencia como único cuerpo de conocimiento real se encuentra visiblemente por delante y por detrás de la investigación positiva.
La concepcion marxista del mundo
La concepción materialista y dialéctica del mundo o concepción comunista del mundo está movida por la aspiración por terminar con la obnubilación de la conciencia, con la presencia de la conducta humana de factores no reconocidos o idealizados. De esto se desprende que es una concepción del mundo explícita. La concepción del mundo marxista no puede considerar sus elementos explícitos como un sistema de saber superior al positivo. El nuevo materialismo, escribe Engels en el Anti-duhring, no es una filosofía sino una simple concepción del mundo que tiene que sostenerse en las ciencias reales. en el queda superada la filosofía y también preservada en cuanto a su contenido real. Se concibe lo filosófico no como superior a la ciencia sino como un nivel del pensamiento científico: el de la inspiración del propio investigar y de la reflexión sobre su marcha y sus resultados.
Y puesto que el punto de llegada es la ciencia real, esa concepción del mundo no puede más que explicitar la motivación de la ciencia misma.
Esta motivación es lo que puede llamarse inmanentismo, el principio de que la explicación de los fenomenos debe buscarse en otros fenomenos, en el mundo y no en instancias ajenas o superiores al mundo. Este principio esta en la base del hacer científico el cual perdería todo
sentido si tuviera que admitir la acción de causas no naturales.
En este postulado del inmanentismo se basa la concepción marxista del mundo. El primer principio de la concepción marxista del mundo, el materialismo, es en sustancia el enunciado del postulado inmanentista: el mundo debe explicarse por si mismo. El materialismo es lo primero en el marxismo, pero el materialismo no es más que uno de los principios fundamentales de lo que Engels llama concepción comunista del mundo. El otro es el principio de la dialéctica.
La ciencia positiva realiza el principio del materialismo a través de una metodología analítico-reductiva. Su eliminación de factores irracionales en la explicación del mundo procede de una reducción de lo más complejo a factores más simples.
El análisis reductivo practicado por la ciencia tiende a obviar conceptos con contenido cualitativo, para limitarse en lo esencial al manejo de las relaciones cuantitativas. El análisis reductivo practicado por la ciencia tiene normalmente éxito. Ésto se debe a su descomposición en elementos más simples, libres de connotaciones cualitativas y a que ésto ayuda a formar conceptos mas adecuados.
Pero precisamente debido a esto sólo se trata conceptos generales, leyes, que pierden parte de lo concreto precisamente la parte que diferencia a cada objeto.
Los todos concretos y complejos no aparecen en el universo del discurso de la ciencia positiva, aunque ésta suministra todos los elementos de confianza para una compresión racional de los mismos. Lo que no suministra es su totalidad, su consistencia concreta. La concepción del mundo
tiene por fuerza que dar de si una determinada compresión de las totalidades concretas.
La tarea de una dialéctica materialista consiste en recuperar lo concreto sin hacer intervenir más datos que los materialistas del análisis reductivo. La palabra análisis en el marxismo es diferente al análisis de la ciencia positiva, este análisis se propone entender la individual situación concreta sin postular más componentes de la misma que los resultantes de la abstracción y el análisis reductivo científicos.
Queda claro cual es el nivel del discurso en el cual tiene sentido hablar de análisis dialéctico: es el nivel de compresión de las concreciones o totalidades, no el del análisis reductivo de la ciencia positiva.
miércoles, 4 de noviembre de 2009
Primera Lectura
Pero antes de cualquier comentario acerca de la lectura se nos habló de la Escuela moderna, concretamente de la escuela libertaria de Barcelona haciendo especial referencia al famoso pedagogo libertario Francisco Ferrer Guardia. El hecho de hablar de él es que estamos en el centenario de su muerte. Este tipo de escuela se trataba en definitiva de profundizar en una enseñanza no religiosa, científica y no competitiva
Respecto ala lectura, lo primero que se nos preguntó fue el sentimiento que reflejó en nosotros dicho texto y hubo respuestas para todo: desde nostalgia a indiferencia. Yo, sinceramente no sabría expresar que sentimiento me dió, pero lo único que podría decir (y no es un sentimiento) es concentración, porque considero que es la única manera de comprender realmente lo que une lee. ¿Cuántas veces la gente "lee" sin realmente estar leyendo, sino más bien observando un conjunto de palabras?
Después pasamos a "diseccionar" el texto sacando lo más importante. En cuanto a la definición de ciencia de Schumpeter se extrajeron los conceptos más importantes para seguir con el texto: ciencia, conocimiento y consciencia.
En definitiva, tras la reflexión a la que nos invita el texto en cuanto a los aspectos del conocimiento, las conclusiones eran que para poder describir la realidad hace falta clasificar aquello que tengamos para tal fin. Lo siguiente sería realizar un análisis de las relaciones para poder explicar dicha realidad. Y, lo más importante de todo ello es que lo obtenido, sea aplicable.
Pero, sin duda, la relevancia que tiene esto en relación con nuestro tema es que todo lo anterior es aplicable al grupo de trabajo.
Otro punto importante, es para finalizar que todo ello, nos sirva para 2 razones: saber sobre un tema y saber contar dicho tema a los demas
lunes, 2 de noviembre de 2009
Características del conocimiento científico
- Debe proporcionar una descripción de esta realidad, aunque no puede limitarse a describir esta realidad, debe explicarla. La ciencia no puede ser simplemente un conjunto de definiciones. La ciencia, como dice Hegel, tiene por finalidad mostrar la necesidad de los objetos.
- No puede conformarse con una explicación cualquiera de la realidad. La condición indispensable para que exista un verdadero conocimiento científico es la exigencia de que la realidad objetiva sea explicada a partir de ella misma, sin introducir momentos, elementos o explicaciones que no pertenezcan a tal realidad. Respecto a esta afirmación anterior, Roberto Carballo difiere al determinar que cómo es posible lograr dicho objetivo (la realidad explicada a partir de ella misma), si ni siquiera es posible delimitar la realidad objeto de estudio. Como afirma Hegel, más que explicar la naturaleza, la Humanidad tiene la obligación de conocerla, es decir, la ciencia más que explicar el mundo debe comprenderlo. Por esta razón, la historia del conocimiento científico es en realidad la historia de cómo la Humanidad se ha explicado el mundo real desde causas fantásticas hasta conocer las relaciones objetivas entre fenómenos de la realidad. En este punto, Carballo hace referencia de nuevo al culto al progreso (ciencia) de Longo, al expresar que en la etapa histórica en que predomina la ciencia como forma de saber, de conocimiento, es no sólo objetiva, sino también la última fase.
El requisito según el cual ha de explicarse la realidad partiendo de ella misma es común a todas las ciencias, e incluso es la característica que define a la ciencia, aquello que distingue a lo que es ciencia de lo que no lo es. La aplicación de este principio sin excepción a todos los fenómenos de la realidad conduce directamente al materialismo filosófico.
- Es únicamente una parte de la actividad humana, tan sólo uno de sus aspectos. El conocimiento nunca es, y no puede serlo, un fin en sí mismo. El hombre desea conocer el mundo para poderlo modificar de acuerdo con sus exigencias y necesidades.
Una fiosofía coherentemente científica forzosamente ha de ser materialista y por tanto basarse en la necesidad de estudiar la realidad objetiva tal y como es y explicarla partiendo de ella misma. El marxismo, que es un materialismo filosófico coherente y llevado hasta sus últimas consecuencias lógicas, constituye la primera concepción del mundo basada total y exclusivamente en la ciencia,
El pensamiento y la acción, el conocimiento y la praxis se condicionan mutuamente, están estrecha e indisolublemente ligados. Pero esa unión no es una ligazón directa, si no mediata, a través del conocimiento, de la cognición. El conocimiento que conduce a la cognición, es premisa de la acción, mientras que la acción es el fin último del conocimiento.Por sí misma la actividad cognisciva no puede y no debe orientarse hacia la consecución de resultados prácticos, hacia la acción, sino que ha de tratar de llegar a la cognición de lo real, que permitirá la futura acción. La ciencia nunca tendrá por objetivo la praxis, pues su meta es la cognición.
El criterio para valorar los resultados obtenidos por la ciencia, será siempre y únicamente la correspondiente de tales resultados a la verdad, a la realidad de hecho, y no la mayor o menor utilidad de tales resultados. Si conocemos la realidad, antes o después surgirán los instrumentos técnicos que nos permitirán modificarla. En base a todo ello podemos describir esquemáticamente la relación entre ciencia y praxis de la forma siguiente: actividad cognisciva --> cognición e interpretación de la realidad --> praxis destinada a modificar tal realidad.
Entre conocimiento y acción existe otra diferencia importante desde el punto de vista metodológico. Así como la praxis, para que tenga éxito, ha de ser, una acción colectiva, la investigación tiene por el contrario un carácter individual. El hombre puede y debe coordinar su acción con la de sus semejantes, pero no puede coordinar su pensamiento con el de los demás; no se ha descubierto una forma colectiva de pensar. El pensamiento es y no puede ser más que individual.
Tanto la acción colectiva como el pensamiento individual son fenómenos sociales y no se diferencian entre sí por su finalidad o su contenido, sino únicamente por su forma de manifestarse. Las modalidades de desarrollo de la acción no coinciden con las del pensamiento. Lo cual significa que no nos podemos dedicar a un mismo tiempo a estos dos distintos aspectos de la actividad humana. Si el hombre de ciencia quiere tener éxito en su investigación, nunca debe preocuparse por las consecuencias prácticas de la misma, nunca deberá permitir que los prácticos obstaculicen su investigación ni le sustituyan en ella, y el hombre de ciencia nunca deberá indicar a los prácticos, a los hombres de acción, lo que deben hacer, sino únicamente lo que deberían tratar de hacer. Si no actúa de esa forma se convertirá en un ideólogo, función práctica que nada tiene que ver con la ciencia. "Es evidente que ningún camino puede llevarnos desde el conocimiento de lo que es al conocimiento de lo que debería ser" (Albert Einstein).
Por último, Carballo introduce frente a estas declaraciones anteriores unas preguntas: cuando un hombre actúa como científico ¿No es también un hombre de acción? ¿Es que la ciencia no es una actividad, una praxis?